Voces RSU | Pensar(se) más allá del aula. El quehacer docente desde la RSU

Ruth Nevado
Asistente de la estrategia de trabajo con docentes en el área de Formación e Investigación Académica de la DARS
Werner Jungbluth
Coordinador de la estrategia de trabajo con docentes en el área de Formación e Investigación Académica de la DARS

“Debo decir que yo, personalmente, soy un co-constructivista, es decir que pienso que construimos la percepción del mundo pero con una considerable ayuda de su parte” (Fried Schnitman 1994, 431)[1]. La cita es del filósofo francés Edgar Morin en una de sus elaboraciones sobre el pensamiento complejo. Siguiendo el argumento, aprehender esta complejidad, requiere una humildad de base, porque se parte por admitir que no se puede conocer todo lo que hay.

De ahí que Morin desconfíe de las consecuencias de una especialización disciplinaria que no dialoga con lo que hay fuera de sí misma: los especialistas dominan ‘su’ tema pero se equivocan mucho más al salir de él porque no pueden prescindir del sentido común[2] sobre todo lo demás. ¿Y cómo enriquecer nuestros sentidos comunes? Conociendo y aprendiendo del mundo. El conocimiento de los ‘mundos’ que hay en nuestro propio país, el cuestionamiento de cómo los conocemos, cómo nos sentimos y cómo somos parte de ellos, es clave para repensar la formación académica.

En el corazón de la Responsabilidad Social Universitaria (RSU) habita una curiosidad por el entorno, una que implica posicionamiento y ánimo transformador pero que concibe a la universidad como una organización permeable que se transforma cuando se atreve a salir de sí misma. En este sentido, implica una actitud ‘natural’ de modestia ante lo imprevisible de las circunstancias de las personas en el mundo.

En esta perspectiva es que la Dirección Académica de Responsabilidad Social (DARS) concibe su estrategia de trabajo con docentes. Buscamos que el aprendizaje que se construye sea contextualizado y, en ese sentido, pertinente. Para ello, confrontar los saberes de la carrera profesional con la realidad permite propiciar espacios para reflexionar, criticar, discutir, sensibilizarse, innovar y desarrollar prácticas académicas más coherentes y responsables socialmente; todo lo cual permitirá fortalecer a los estudiantes como futuros profesionales, pero sobre todo como ciudadanos y ciudadanas.

Una forma de dar soporte institucional a la reflexión y acción de la RSU en el quehacer de los y las docentes, es el Fondo Concursable para Docentes (FCD), promovido por la DARS. Acabamos de lanzar, con mucha expectativa, el FCD 2018. Lo que se busca es pasar de las ideas a la acción. Una de las ganadoras del año 2017, la Dra. María de los Ángeles Fernández, señala lo siguiente: “El fondo nos ofrece a los profesores una oportunidad excelente para llevar a la práctica los conocimientos y habilidades desarrollados en el mundo académico. En este proceso de aplicar, implementar y socializar con la población con la que se está llevando a cabo la iniciativa, aprendemos todos y ganamos”[3].

El trabajo de la DARS dentro y fuera del campus es una apuesta por transversalizar el enfoque de la RSU como tarea prioritaria para nuestra universidad. El trabajo con docentes y el FCD es un aporte para que los y las docentes y estudiantes comprendan más y mejor y, de esa forma, sientan que el mundo se amplía cuando contribuimos a su transformación.

[1] Fried-Schnittman, Dora (comp.). Nuevos paradigmas, cultura y subjetividad. Buenos Aires: Paidós, 1994.
[2] Morin emplea el término “ideas generales”.
[3] En Punto.edu, Año 13, N.° 426.