Voces RSU |De violencias y resistencias. La comunidad LGBTI en la PUCP

Ángela Mera Mejía
Estudiante de octavo semestre de Sociología
Activista de GPUCP y Manada Feminista

José Luis Rosales Lassús
Sociólogo
Asistente General de la Dirección Académica de Responsabilidad Social (DARS)
Docente Contratado del Departamento Académico de Ciencias Sociales – Sección Sociología

Cada 28 de junio se conmemora el día del orgullo LGTBI, y en nuestro país, este sábado saldremos a manifestarnos para recordarle al Estado y sus instituciones, a las organizaciones, y a nosotrxs mismxs, que estamos vivos y muy orgullosxs de seguir resistiendo. Los recientes crímenes de odio, como el de Zuleymi, la niña trans de Trujillo, así como el homicidio masivo de Orlando, nos dejan con mucha rabia, pero al mismo tiempo, con muchas ganas de seguir peleando para cambiar las cosas.

Aunque somos testigos de ciertos cambios en el mundo, aún en nuestro país falta mucho por lograr. La violencia homolesbotransbifóbica nos afecta incluso en espacios que creemos seguros, como la familia o ciertas instituciones educativas. En el caso de la PUCP, pese a identificarse como un espacio plural y humanista, siguen existiendo prácticas que agreden y violentan a gays, lesbianas, bisexuales, y trans.

Sin embargo, desde hace varios años, los colectivos estudiantiles de la PUCP vienen desarrollando diferentes acciones con el fin de hacer de esta casa de estudios un espacio más seguro y respetuoso de la diversidad sexual. Desde hace unos meses, la red Divergen, conformada por grupos de estudiantes como Manada Feminista y GPUCP, así como profesores y estudiantes independientes,  se encuentra desarrollando, con el respaldo de la DARS, un diagnóstico sobre la violencia por identidad de género y orientación sexual en nuestra universidad. La producción de conocimiento de manera interdisciplinaria nos ha permitido empezar a problematizar cuestiones que pensamos como normales o cotidianas, como son los chistes homofóbicos, las pintas, o las bromas sexistas en clase, y, además, hacer visibles las formas en las que las personas se han sentido violentadas y cómo han resistido a ello. Esto es “develar el sentido común” –como lo llamamos desde la sociología – y nos sirve para tomar distancia de la realidad, analizarla, y generar conocimiento que nos permita incidir y elaborar medidas que podríamos tomar frente a la violencia.

Nos reconocemos como miembrxs críticxs de la comunidad universitaria, y así como ahora rastreamos las diferentes formas de violencia y resistencia, creemos que es indispensable producir conocimiento sobre los colectivos que le han hecho frente al machismo, la homofobia, y la transfobia en la Universidad desde hace varios años ya. Se trata de conocer y reconocer las resistencias que desde hace por lo menos 15 años vienen desarrollando distintos colectivos LGBTI en la PUCP.